Zelaya retorna con el acuerdo del imperialismo
voselsoberano.com | Jueves 02 de Junio de 2011 22:02
Cristian Henkel (Prensa Obrera)
CORTESIA VOS EL SOBERANO
El retorno de Zelaya a Honduras comenzó el 9 de abril en Cartagena de Indias, Colombia, cuando los presidentes Santos y Chávez, junto al presidente de Honduras, Porfirio Lobo, lo canjearon por la reincorporación de Honduras a la OEA, de la cual fue suspendida el 4 de julio de 2009 debido al golpe de Estado.
A inicios de mayo, Brasil respaldó el acuerdo, que consagraba por sobre todo la ‘reconciliación' colombo-venezolana, luego de la partida de Uribe. La mediación de Santos y Chávez fue pedida, sin embargo, por el propio Porfirio Lobo, ante la firmeza del movimiento popular que enfrentó el golpe, y también ante la desesperada necesidad de acceso a financiamientos y comercio internacionales. En el marco de estas negociaciones se firmó también una integración aduanera de Centroamérica entre Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua.
Chávez y Santos encuadraron la normalización entre ellos en una reorganización diplomática más general.
La vuelta de Zelaya satisface además la necesidad de Honduras de adquirir petróleo más barato por medio de la chavista Petrocaribe. "Como diputados nos sentimos alegres porque el presidente Lobo inicie pláticas que podrían significar beneficios muy importantes a través de Petro caribe, especialmente en este momento en que se vive una crisis por los altos precios del petróleo", señaló el diputado oficialista Guillén.
En 2008, bajo la presidencia de Zelaya, Honduras había suscripto el convenio de adhesión a Petrocaribe, en virtud del cual Venezuela se comprometió a suministrar 20,000 barriles diarios, que al año se traducirían en un crédito por 730 millones de dólares en el período 2008-2009.
De las condiciones exigidas por Zelaya para su vuelta - la anulación de los procesos judiciales abiertos en su contra, el respeto a los derechos humanos, la convocatoria de una constituyente y el reconocimiento de la Resistencia como partido político - sólo obtuvo la primera. Zelaya regresó, sin embargo, con planes de convertir al FNRP en un partido político para competir en las elecciones de 2013 -aunque no podrá postularse a la presidencia por impedimento constitucional.
El tema de la reforma de la Constitución fue incluido en el acuerdo firmado con Lobo, pero requiere un plebiscito de trámite incierto. Como alternativa, el FNRP pretende levantar como candidata a la esposa de Zelaya, Xiomara Castro.
Miles de personas se movilizaron al aeropuerto para recibir a Zelaya, aunque desde allí fue trasladado a una base de la Fuerza Aérea Hondureña, (FAH). En el acto, a su llegada, Zelaya dejó en claro que no retornaba en forma incondicional sino como resultado de "un acuerdo democrático", lo cual supone la defensa del gobierno establecido.
"Vamos a un proceso de reconciliación, pero en el campo político vamos a seguir con el proceso de la cuarta urna y la Constituyente para lograr la reelección (...) Los problemas de pobreza, corrupción -agregó- no se resuelven con violencia, sino con democracia", sin hacer referencia al asesinato sistemático de periodistas y de militantes.
Poco después del acto, Zelaya fue recibido en la casa de gobierno por Lobo. Ham, uno de los f uncionarios de Lobo, explicó la reconciliación como "el resultado natural de las buenas relaciones que existen entre las familias de uno y otro desde hace cuarenta años".
Mientras la diplomacia trabajaba para el retorno de Zelaya a Honduras, Héctor Medina Polanco se convertía en el onceavo periodista asesinado durante el mandato de Lobo. En lo que va del año se han registrado 40 casos de violaciones a la libertad de expresión en contra de trabajadores de la prensa.
En este mes, José Paulino Lemus Cruz, de 30 años, miembro del Movimiento Campesino del Aguán, fue ultimado de un balazo en el pecho y Henry Roney Díaz, miembro del Movimiento Auténtico Reivindicador de Campesinos del Aguán fue asesinado durante un intento de desalojo por parte de los cuerpos represivos del Estado, que también dejó gravemente herido a Manuel Vásquez.
En los últimos quince meses, 27 los integrantes de organizaciones campesinas del Bajo Aguán han sido asesinados. U na matanza ligada al acaparamiento de la tierra por parte de unos cuantos terratenientes y productores palmeros y la lucha por la sobrevivencia de miles de familias campesinas. El Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh) condenó "enérgicamente la inminente incorporación del régimen a la OEA, a quienes les decimos que si piensan que harán borrón y cuenta nueva, se equivocan, se equivocan desde sus fríos cálculos económicos, desde su pragmatismo político, desde su urgencia de servir al imperialismo en su proyecto de reacomodo en el continente, se equivocan desde su hipocresía al reconocer un régimen que asesina, que es continuador del golpe de Estado y que no ha cumplido con las condiciones puestas por la misma OEA por las cuales fue expulsado".
Juan Barahona, subcoordinador del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), también señaló que "Honduras no debería regresar todavía a la OEA", debido a que no se han establec ido todas las condiciones acordadas (Telesur).
Durante el exilio de Zelaya se mantuvo una movilización popular extraordinaria por más de 700 días. Su retorno es la expresión superficial de un proceso histórico sin precedentes de las masas. No hay que olvidar que regresa en el marco de un acuerdo con el imperialismo.
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