Honduras: Un evidente autor intelectual de futuros asesinatos
Por su propia boca, el señor Mauricio Villeda es corresponsable de lo que ha pasado y está pasando en nuestro país en el tema de seguridad y crimen; no sólo de eso, de la terrible muerte que se avecina contra otros compatriotas.

Las guerras contra pueblos vulnerables y desarmados, en todo lugar del mundo, van acompañadas de necesarias estrategias psicológicas que requieren de personas y medios claves para reproducir verdades y hechos que, en principio parecen torpezas, supuestos y hasta actos temerarios, pero lo cierto es que son mensajes específicos de operaciones en marcha.
Estas acciones están en todos los manuales de las agencias de inteligencia, la táctica puede ser la misma, la variante está en los momentos que son distintos y en la habilidad del que ejecuta la función.
En Honduras los heraldos negros son los jinetes del apocalipsis, por ejemplo, en el marco del golpe de Estado el cardenal Óscar Andrés Rodríguez profetizó el baño de sangre que aún cubre a centenares de familias hondureñas.
Y antes que el sacerdote, los mismos que ahora son probados golpistas vaticinaban que el Presidente sería derrocado y etc., ahora Mauricio Villeda, el mandadero del dictador Roberto Micheletti, anuncia asesinato y secuestro de personalidades.
Conocidos los antecedentes no hay razón para dudar que la matanza sigue en nuestra tierra, ya se sabe a quiénes van a liquidar, y tampoco hay espacio para ignorar que con esas declaraciones el señor Villeda se convierte en el primer sospechoso intelectual en la autoría de crímenes que ha advertido públicamente y de los que dice poseer pruebas que le entregó Álvaro Uribe, expresidente de Colombia y, de acuerdo a la DEA, ocupa el lugar número 82 en la lista de líderes del narcotráfico.
Por su propia boca, Villeda es corresponsable de lo que ha pasado y está pasando en nuestro país en el tema de seguridad y crimen; no sólo de eso, de la terrible muerte que se avecina contra otros compatriotas. Es responsable ante la ciudadanía y ante la ley sino presenta pruebas frente a una sociedad que espera razones y no más guerra de terror de personas que al menos deberían respetarse a sí mismas por la edad avanzada que en efecto indica que más temprano que tarde tendrán que desencarnar.
A esta hora en cualquier país del planeta donde exista Estado de Derecho, el señor Villeda hubiese sido llamado por los órganos judiciales para presentar toda la información que –según él— explica con detalle cómo cegarán la existencia de gente patriota que demanda cambios reales en el sistema político y económico nacional.
Y de no mostrarlas a través de los medios masivos de comunicación, por oficio, el señor Villeda puede ser conducido a prisión por evocar terrorismo, falso testimonio, encubrimiento de información y obstrucción de investigación a la justicia, por cualquier razón, igual como se impondría cárcel a todo connacional que no tiene linaje, tampoco dinero y comete un delito.
Con mayor razón la justicia debe emplazar ya al señor Villeda, lo que ha dicho es gravísimo, está diciendo que van a asesinar personalidades hondureñas, a quien sea, el valor de la vida humana vale y se respeta igual. FUENTE EL LIBERTADOR