Más impuestos
voselsoberano.com | Lunes 01 de Agosto de 2011 07:10
Editorial, Diario Tiempo
La receta del Fondo Monetario Internacional (FMI) para los países de América Central es que los gobiernos aumenten sus ingresos tributarios, en preparación de la defensa ante otra crisis financiera mundial que asoma en el horizonte, similar a la de 2008-2009.
Esta es la principal conclusión de la X Conferencia Regional de Centroamérica, Panamá y República Dominicana con el FMI, en la que funcionarios de este organismo internacional insistieron en que América Central es una de las regiones del mundo donde se pagan menos impuestos.
Lo asombroso de esas conclusiones del FMI es que, para su burocracia, “el reto clave para Centroamérica en el mediano plazo es aumentar el crecimiento económico y consolidar la estabilidad macroeconómica disminuyendo a la vez la pobreza, además de reconstruir el espacio fiscal y fortalecer los marcos tributarios”.
La experiencia en Honduras —el país más sometido a las directrices del FMI, y, por lo tanto, el más empobrecido— demuestra que esa política ha tenido y sigue teniendo el efecto contrario, incluyendo la disminución del ingreso fiscal y el debilitamiento monetario, tal como se presenta dramáticamente la situación en estos momentos.
Parece muy claro que las medidas tributarias aplicadas por el gobierno siguen la pauta del FMI sin considerar nuestra realidad económica y social. Después de todo, como lo indican los mejores expertos hondureños en materia económica y financiera, al FMI lo único que le interesa es ingreso fiscal y control de inflación.
Así, el director del FMI para el Hemisferio Occidental, Nicolás Eyzaguirre, ha dicho en la X Conferencia Regional: “Todavía hay espacio para que los gobiernos hagan reformas fiscales y aumenten sus ingresos tributarios”. En Honduras ya se puso en vigencia el “paquete” de impuestos para la seguridad (Impuesto de Guerra) y la subasta de divisas, cuyo cometido es la devaluación del lempira.
Por esa vía lo que tenemos ahora y en el horizonte es más pobreza e incertidumbre en el futuro del país, que, a decir verdad, es un Estado que se va desdibujando, desintegrando en proyectos de “ciudades modelo”, en enclaves “charters” que ponen en evidencia el desmantelamiento en Honduras de la institucionalidad y la deslegitimación de su Constitución Política.
No hay duda de que la crisis política de Estados Unidos, de la que el problema de la deuda pública es una de sus manifestaciones, nos afecta a los centroamericanos y a los hondureños, en particular. El lempira “flota” —o se hunde— con el dólar. Ese enfrentamiento de la ultraderecha republicana contra el presidente Obama es tan extremista que puede llevarse al mundo entre sus cascos.
Como el FMI fue creado para proteger el sistema corporativo internacional, que controla el poder político global, es difícil que la periferia quede a salvo. Por eso se dice que cuando los elefantes pelean, la que sufre es la hierba. Y en esa situación estamos, con el agravante de que no hay capacidad gubernamental para buscar la salida y se ha perdido el sentido de lealtad a la Patria.
La receta del Fondo Monetario Internacional (FMI) para los países de América Central es que los gobiernos aumenten sus ingresos tributarios, en preparación de la defensa ante otra crisis financiera mundial que asoma en el horizonte, similar a la de 2008-2009.
Esta es la principal conclusión de la X Conferencia Regional de Centroamérica, Panamá y República Dominicana con el FMI, en la que funcionarios de este organismo internacional insistieron en que América Central es una de las regiones del mundo donde se pagan menos impuestos.
Lo asombroso de esas conclusiones del FMI es que, para su burocracia, “el reto clave para Centroamérica en el mediano plazo es aumentar el crecimiento económico y consolidar la estabilidad macroeconómica disminuyendo a la vez la pobreza, además de reconstruir el espacio fiscal y fortalecer los marcos tributarios”.
La experiencia en Honduras —el país más sometido a las directrices del FMI, y, por lo tanto, el más empobrecido— demuestra que esa política ha tenido y sigue teniendo el efecto contrario, incluyendo la disminución del ingreso fiscal y el debilitamiento monetario, tal como se presenta dramáticamente la situación en estos momentos.
Parece muy claro que las medidas tributarias aplicadas por el gobierno siguen la pauta del FMI sin considerar nuestra realidad económica y social. Después de todo, como lo indican los mejores expertos hondureños en materia económica y financiera, al FMI lo único que le interesa es ingreso fiscal y control de inflación.
Así, el director del FMI para el Hemisferio Occidental, Nicolás Eyzaguirre, ha dicho en la X Conferencia Regional: “Todavía hay espacio para que los gobiernos hagan reformas fiscales y aumenten sus ingresos tributarios”. En Honduras ya se puso en vigencia el “paquete” de impuestos para la seguridad (Impuesto de Guerra) y la subasta de divisas, cuyo cometido es la devaluación del lempira.
Por esa vía lo que tenemos ahora y en el horizonte es más pobreza e incertidumbre en el futuro del país, que, a decir verdad, es un Estado que se va desdibujando, desintegrando en proyectos de “ciudades modelo”, en enclaves “charters” que ponen en evidencia el desmantelamiento en Honduras de la institucionalidad y la deslegitimación de su Constitución Política.
No hay duda de que la crisis política de Estados Unidos, de la que el problema de la deuda pública es una de sus manifestaciones, nos afecta a los centroamericanos y a los hondureños, en particular. El lempira “flota” —o se hunde— con el dólar. Ese enfrentamiento de la ultraderecha republicana contra el presidente Obama es tan extremista que puede llevarse al mundo entre sus cascos.
Como el FMI fue creado para proteger el sistema corporativo internacional, que controla el poder político global, es difícil que la periferia quede a salvo. Por eso se dice que cuando los elefantes pelean, la que sufre es la hierba. Y en esa situación estamos, con el agravante de que no hay capacidad gubernamental para buscar la salida y se ha perdido el sentido de lealtad a la Patria.
http://tiempo.hn/index.php/editorial CORTESI VOS EL SOBERANO
